Rafati fue visto la noche anterior en el bar del hotel Hyatt. Pero el dia del partido,no se presentó a desayunar ni a la charla previa al encuentro con sus asistentes. En vista de que no contestaba a las llamadas de teléfono y que tampoco abría la puerta de su habitación pidieron la ayuda de una camarera para acceder a la misma. Lo encontraron ensangrentado en la bañera.
Rafati, árbitro internacional de origen iraní, vive en Hannover, es empleado de banca y desde 1997 está adscrito como colegiado a la Federación Alemana. Ha dirigido 84 partidos de la Bundesliga desde su debut, en agosto de 2005, precisamente en un encuentro entre el Colonia y el Mainz. Entre 2000 y 2005 pitó en Segunda. En 2008 fue designado colegiado FIFA
En el dia de hoy ha dejado el hospital donde fue tratado en Colonia, dos días después de su intento de suicidio que ha causado una conmoción en el fútbol alemán y que ha recordado otros casos de problemas psíquicos como los del meta Robert Enke o el centrocampista Sebastian Deisler.
El presidente de la Liga Alemana de Fútbol, Reinhardt Rauball, apeló hoy a que se revise la actitud que suele tenerse ante los árbitros."Hay que ver esto como una señal de que los árbitros son algo más que un blanco para burlas y silbidos. Son gente que tiene una función importante", agregó.
De momento, las razones que llevaron a Rafati a intentar suicidarse se desconocen y no se sabe si tienen que ver con sus actividad como colegiado.
Sin embargo, muchos medios de comunicación han recordado que Rafati ha "ganado" en tres ocasiones la discutida encuesta entre los jugadores que realiza la revista "Kicker" acerca de quién es el peor árbitro de la Bundesliga.
En la última edición de la encuesta, sin embargo, Rafati cedió el testigo a Wolfgang Stark.Rafati, de 41 años, había sido retirado para 2012 de la lista de árbitros FIFA alemanes.
El intento de suicidio de Rafati ha hecho que muchos recuerden el suicidio de Robert Enke, víctima de depresiones clínicas que mantuvo ocultas para no poner en peligro su carrera.Después del caso Enke, hubo una discusión en el fútbol alemán acerca de la necesidad de un trato más humano y de mayor apertura a la hora de afrontar posibles problemas psicológicos.
Fuente: as.com
